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Grupo Los Llanos
Aceite de orujo de oliva
La producción de aceite de orujo de oliva es un proceso complejo que requiere de maquinaria especializada. Primero, se realiza la extracción del aceite de oliva virgen a partir de las aceitunas frescas. Luego, los restos sólidos de la aceituna se someten a un proceso de secado y deshidratación para eliminar el exceso de agua. Una vez secos, se trituran y se someten a un proceso de extracción con disolventes para obtener el aceite de orujo de oliva.
Este tipo de aceite tiene propiedades muy interesantes. En primer lugar, tiene un alto contenido de ácidos grasos monoinsaturados, lo que lo convierte en un a opción saludable para el consumo humano. Además, su sabor es suave y delicado, lo que lo hace ideal para su uso en la cocina.
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Hueso de aceituna
Nuestro hueso procede de las aceitunas tratadas en las almazaras. Una vez molturadas y extraído el aceite de oliva por procedimientos físicos, pasan por una planta de limpieza, calibrado y secado en donde se obtiene el hueso. Se trata de un producto homogéneo, limpio y de máximo poder calórico.
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Pellets
Respetuoso con el medio ambiente porque para su obtención no se necesitan talar nuevos árboles y durante su ignición no se emiten gases de efecto invernadero. Además, los restos de la combustión son biodegradables y pueden ser usados como fertilizantes.
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Orujillo
Al procesar la aceituna para sacar el aceite, esta se queda convertida en una especie de pasta formada por el hueso y el resto de la pulpa, que se denomina orujo. La biomasa obtenida del orujo de dos o tres fases una vez deshuesado parcialmente, reducida la humedad en secaderos tipo trómel y desengrasado en plantas de extracción física-química, se denomina orujillo.